22 octubre 2014

Anécdotas traumáticas que me sirvieron de Máster 1: Los inicios.

He decidido empezar una nueva sección de entradas en las recopilaré sólo anédotas de rodaje. Pero anédotas de esas que me hicieron pasarlo mal, y a la larga se convirtieron grandes lecciones. Y como con todo, empezaré por el principio: cagadas de mis primeros rodajes, hasta llegar a las actuales. Algunas serán cagadas mías, y otras serán cagadas ajenas que me afectaron, pero todas me habrán servido para aprender algo nuevo. ¿Os parece? Pues sin más preámbulos, aquí tenéis mi primera tanda de meteduras de pata (que espero que alguno de vosotros esté a tiempo de ahorrarse).

1. La "niñata de mierda"


El segundo proyecto de mi vida fue un cortometraje en el que yo estaba de script. Todavía estaba acabando el instituto, y recuerdo que llegué al rodaje pletórica perdida, intentando camuflar toda mi inexperiencia en ilusión, y ser durante un rato una esponja absorbe-conocimiento ajeno. No tenía ni idea de lo que estaba haciendo, pero las ganas no me las quitaba nadie.

Y así, empezamos la jornada rodando un interior noche en un piso de Madrid. A las diez de la mañana. El set estaba en penumbra, con persianas a medio bajar por las que se colaba la luz exterior. Y yo estaba contenta pero histérica, así que me senté en el monitor a comprobar como una psicópata cada detalle, aunque todavía no hubiéramos empezado a rodar. De pronto, un tío con cara de simpático se sentó a mi lado. La cosa fue así:

DESCONOCIDO 1
(con una sonrisa de oreja a oreja)
 Bueno qué, ¿qué te parece la iluminación?
-
EVA ADOLESCENTE
(se lo piensa un instante)
    Mmmm… es bonita. Pero… se nota mucho 
que fuera es de día, ¿no?

DESCONOCIDO 1
(deja de sonreir y respira hondo)
Se llama noche americana y es
un recurso muy utilizado.

Después, se levantó y se fue. Acto seguido empecé a escuchar gritos en la cocina: “¡Estoy hasta los mismísimos cojones de que me traigáis niñatos de mierda a los rodajes! ¿Pero de dónde sacáis a esta gente? ¿Quién cojones se cree que es la gilipollas esta para meterse en algo de lo que no entiende? (…)”. La cosa siguió así un rato y yo me quise morir. Como habréis deducido, el tipo además de no ser nada simpático, era el Director de Fotografía. Y yo una niñata sin experiencia que acababa de opinar sobre su trabajo.

Vale, opiné porque él me lo pidió. Pero normalmente la gente que está trabajando en un rodaje sabe lo que está haciendo, y a nadie le gusta que personas que no tienen ni idea del tema vengan a decirnos cómo hacer nuestro trabajo. Que yo sigo pensando que el tipo no debió preguntarme algo así. Pero mi comentario fue desacertado, y aunque en el momento lo pasara mal, aprendí una valiosísima lección para el resto de mi vida: no te metas en el trabajo ajeno. Nunca. Somos un equipo, sí, pero salvo casos en los que haya mucha confianza… deja a cada loco con su tema. Casi siempre es lo mejor para todos.


2. La comodona


Más adelante, en uno de los primeros rodajes estando ya de ayudante de dirección, yo, flipada de mí, tuve la ilusoria sensación de que todo estaba bajo control. Estaba esperando a que los actores estuvieran listos y a la vez estaban acabando de iluminar, así que aprovechando la modorra de después de comer, decidí sentarme bastante repanchingada a esperar a que alguien me dijera que estaban listos.

Unos siete minutos después, se me acercó el jefe de producción y espetó un: "Te voy a decir algo que quiero que se te grabe a fuego para el resto de tu vida: un ayudante sentado es un ayudante acabado. Mañana no hace falta que vuelvas". Yo me levanté como un resorte, le pedí disculpas y le dije que tampoco se pusiera así, que no volvería a pasar. Y él me dijo que la única forma de que aprendiera de verdad la responsabilidad que supone ser ayudante de dirección era con consecuencias reales.

Efectivamente, al día siguiente no volví y no me he vuelto a sentar en un rodaje. De hecho, cada vez que veo a alguien del equipode dirección o producción (y no están por encima de mí en la cadena de mando, seamos sinceros), me acerco a contarles la anécdota. Yo no he despedido a nadie por eso, pero sí se lo cuento para que también se lo apliquen, y de momento ha funcionado.

¿Pero eso quiere decir que no nos podemos sentar jamás? Nada más lejos. A veces hay que sentarse a revisar la Orden del día siguiente, o ponerse de doble de luces, o repasar el guión técnico con el director, o comer, sin más. Claro que nos sentamos, varias veces al día. Pero no para descansar o a pasar los ratos muertos, porque eso transmite desidia al resto del equipo, y que nosotros nos sentemos da implícitamente permiso al resto para hacer lo mismo. Es como lo de prohibir fumar en el set y echarte un cigarro tú. Mal, porque implícitamente autorizas al resto a hacerlo.

Si estás en dirección, procura que ese no seas tú (© Terry Hall.)

Supongo que a veces es necesario aprender a base de palos, pero cuando te pase... ¡ánimo, que la siguiente seguro que la clavas!

01 octubre 2014

Dinámicas de rodaje en PUBLICIDAD

El otro día hice un pequeño experimento en Facebook preguntando sobre qué queríais que tratara el siguiente post, y ganó el que ahora leéis, así que… ¡a por ello! Los rodajes publicitarios también tienen sus peculiaridades. Yo personalmente reconozco que me gustan mucho, y por varios motivos:

1.       Se cobra mejor. Bastante mejor que en todo lo demás, de hecho. Así que vienen muy bien para ahorrar y generar un colchón del que poder vivir un rato mientras haces ficción/otra cosa. Aunque ojo, lo habitual es cobrarlos a 60 o 90 días desde el fin de rodaje y que tengas que ser Freelance. Y por ende, que pagues autónomos, hagas tus facturitas y demás (ouch).
2.         Normalmente son proyectos breves pero intensos: te da tiempo a engancharte de ellos y disfrutarlos, pero se acaban justo cuando podrían empezar a aburrirte. Así que son perfectos para aquellos a los que, como a mí, os guste hacer cosas muy distintas en poco tiempo.
3.        El presupuesto es más alto, en general, por lo que es el rodaje ideal para probar ese cacharrito tan guay que te apetecía un montón pero no te podías permitir.  Y normalmente también tenemos reservas de espacio como Dios manda y ese tipo de cosas que en pelis sí, pero ay, qué poquitos cortos. 


Suso Sudón y Carmen Valverde, protas de la última publi
que he rodado, posando junto a la reserva de espacio.

4.        Conoces a gente muy, muy pro, de la que aprendes una barbaridad (aunque esto también tiene a veces el lado negativo de los egos y los dictadores en potencia). Los técnicos especializados en publicidad (que yo la hago, pero especializada no estoy), suelen ser personas más que curtidas en el oficio, que se saben todos los recovecos y que además trabajan con mucha frecuencia fuera de nuestras fronteras. Así que mi recomendación es que abráis mucho los oídos y los ojos, porque vais a poder aprender una burrada de grandes y tenéis muy poco tiempo para sacarle jugo al asunto (hasta que os volváis a encontrar, que esperemos que sea pronto).

¿Pero cómo funciona un rodaje publicitario? Antes de que el ayudante de dirección se incorpore ya han pasado unas cuantas cosas, que simplificándolas mucho, habitualmente se resumen en algo así:
  • El cliente/la marca se pone en contacto con una Agencia, y les proporciona todo tipo de información sobre el producto que pretenden vender. Características, especificaciones, valores de marca… y todo aquello que no debe faltar en el spot. A veces también se convoca una especie de concurso, en el que varias Agencias hacen una propuesta al cliente y éste elige la que más le guste para llevar a cabo la campaña.
  • La Agencia hace una propuesta creativa del spot. Aquí entra la figura del Copy, que a grandes rasgos, es la de la persona de la agencia encargada de verbalizar esa propuesta creativa. Digamos que la Agencia propone un “guión literario”, y cierta propuesta estética, que a menudo incluye un storyboard previo. Todo esto se plasma en un briefing, que la Agencia le pasa a una Productora para que acabe de darle forma.
  • La Productora encarga el spot al Realizador de su “plantilla”, al que considere más idóneo para la campaña. Y a veces, puede ser la propia Agencia quien pida a un realizador reputado en concreto, poniéndose en contacto con la productora para que intermedie.

A partir de aquí, empieza el proceso de pre-producción más convencionalplan de rodaje, scouting, casting, desgloses, y todo lo que ya os sabéis. Y a veces, cuando te incorporas al proyecto, te encuentras con que el equipo de produ ya ha hecho buena parte del curro que normalmente haces tú. Si os pasa, capacidad de adaptación que es la clave de la felicidad, y luego puesta en común: varias cabezas juntas piensan mejor que una sola.

La palabra que más vas a escuchar de aquí en adelante es PPM. Que no es una palabra, pero la vas a oír con más frecuencia que tu nombre. PPM son las siglas en inglés para “Pre Production Meeting”, o lo que es lo mismo, la reunión previa al rodaje en la que se juntan cliente, agencia, productora y realizador con una propuesta más que en firme y detallada de todo lo que se va a rodar: un power point muy bonito con todo detalladísimo, plano a plano. Estas presentaciones las hace la productora según lo acordado con agencia, y es muy importante que sean tan visuales como sea posible. ¿Porqué? Porque el cliente no es del gremio, y si a tus padres les cuesta entender qué carajo haces en tu trabajo, imagínate a estos.  Pues eso, visualidad.

Yo comprobando que todo cuadra con lo pactado,
en el corte para bocata (con Bruno Teixidor)
De esa bonita reunión, pueden salir todos victoriosos y pletóricos de cara al rodaje, o puede que la productora empiece a blasfemar según cruce la puerta y convoque a todo el mundo para que pasemos la noche en vela cambiando absolutamente todo.  Que lo segundo es menos frecuente, pero cuando pasa suele ser porque el cliente pide cosas incoherentes y es quien manda, así que nos echamos unas risas y le damos la vuelta a todo como campeones.

Y una vez aprobado todo lo dicho en la PPM… ¡a rodar! Algo llamativo como ayudante de dirección en publicidad es que, a diferencia de en otros formatos, en publi hay mucha gente por encima de ti (cuanto más grande sea la campaña, más todavía). Seguimos siendo los “jefes del set”, pero hay que confirmar cada decisión con un montón de gente.

En el set de rodaje, además de todo el equipo habitual, hay que sumar a representantes de la agencia (varios) y del cliente (a menudo), más el productor ejecutivo o el Producer a la vera de ambos, un poco de mediador. Todos ellos sentaditos en el combo y cada uno con sus cascos. Y así, cada vez que el director de una toma por buena, tienes que acercarte al combo para comprobar que todos ellos también están de acuerdo. Y si no fuera el caso, tenemos que repetir la toma. 

Yo en publicidad planifico siempre el rodaje dándole mucho más tiempo a cada plano del humanamente lógico. Que lo habitual es que el rodaje sea rápido y fluido (lo que hablábamos del equipo de cracks andantes), pero tengo que contar con que además de las repeticiones, la Agencia me va a pedir variaciones de una misma cosa. Tener una opción de que la actriz haga tal, en vez de cual. Y esos planos, aunque el director no los quiera, hay que hacerlos. Porque el montaje final es de la Agencia, no del director. Y en la Agencia tampoco son tontos, y las cosas las piden por algo, así que hacedles caso.

Dos cosas importantes que hago yo sabiendo todo esto:
  • En la cabecera de Orden de Rodaje, incluyo además del logo de la Productora, el de la Agencia. Debajo, los datos fiscales de la Productora, el nombre del Productor Ejecutivo y el Producer, y especifico la Agencia y el Cliente.
  • Los planos acordados con agencia y cliente cuando se da el OK conjunto en la PPM son los que forman parte del Shooting (dibujos en viñetas de los planos a realizar). ¿Quiere decir eso que son los únicos planos que vamos a rodar? No. Quiere decir que son los mandatorios, los que no podemos recortar por muy pillados de tiempo que vayamos, los que hay que hacer sí o sí. ¿Os acordáis de los planos que apuntaba yo como prioritarios al reunirme con el director?, pues esto es lo mismo, sólo que aquí la decisión no es sólo suya. Los planos extra que hagamos (que los haremos) son accesorios, y aunque puede que alguno sea tan chulo que en rodaje se decida conjuntamente que mola un montón y hay que hacerlo, siempre hay que priorizar el Shooting pactado.
Parte del Shooting de un spot que rodé con NEURADS este verano

A lo que me refería antes con lo de que “cuanto más grande sea la campaña, más gente por encima” es a que puede pasar, por ejemplo, que nosotros estemos rodando un spot en Madrid que en realidad forma parte de algo mucho más tocho que se está rodando en otras ciudades del mundo, con otros equipos. Y hay que mantener una coherencia entre esos fragmentos, así que en rodaje también habrá que estar pendiente de que por ejemplo, la iluminación de aquí cuadre con lo que nos han mandado de Nueva York. O lo que es lo mismo: hay un huevo de gente por encima de ti. Asúmelo y hazlo lo mejor que puedas, que seguro que es muy bien y la próxima vez te vuelven a llamar (y hasta te pagan más).

En definitiva: la diferencia principal en rodaje es que es tan importante la voz del realizador, como la del productor ejecutivo, como la de la Agencia, como la del cliente. Todo ello sin olvidar que también tenemos que coordinarnos con Producción como en cualquier otro rodaje, con el pequeño matiz de que aquí nos estamos gastando más dinero en menos tiempo.

Y sí, la publicidad es estresante, las jornadas son más largas de lo ético y a veces te conviertes más en psicólogo que en ayudante, mediando entre las ocurrencias del director y la agencia. Pero son rodajes taaaaaan chulos, te rodeas de profesionales tan maravillosos y aprendes tanto, que el subidón de adrenalina te va durar un par de días. Así que a disfrutarlo con moderación, que en mi al menos… ¡la publi crea adicción!

08 agosto 2014

El imprescindible tándem Producción/Dirección

La relación entre el departamento de Producción y el de Dirección es tan estrecha que muy a menudo, incluso dentro de los equipos, se confunden (y se solapan las funciones). Pues bien, hoy os voy a explicar cuáles son a mi entender las diferencias fundamentales que afectan al resto del equipo, y cómo nos coordinamos entre nosotros.

Me ocurre a menudo, por no decir a diario, que estando en rodaje me pregunten a mí cosas que son de Producción, y a ellos cosas que deberían preguntar a mi equipo. Así que se me ha ocurrido una diferenciación sencilla:

  • ¿Tu duda es sobre algo relacionado con actores o con la dinámica del rodajeTu respuesta la tiene DIRECCIÓN.
  •  ¿Tu duda tiene que ver  con cuestiones logísticasTu respuesta la tiene PRODUCCIÓN.

Os dejo por aquí algunos ejemplos de preguntas habituales en rodaje, para explicar mejor a qué me refiero en cada caso:


Ahora bien, para contestar a todas esas preguntas (y para que el rodaje funcione en general) tenemos que estar muy coordinados entre nosotros. Y esa coordinación empieza en preproducción.

Como sabéis, el Plan de Rodaje normalmente lo hace el 1er Ayudante de Dirección pero siempre lo contrasta con el Jefe de Producción (o con el Director de Producción, o con el Productor Ejecutivo, o con el Producer en publicidad, o con todos ellos, depende). ¿Por qué? Pues porque a mí me puede parecer una idea genial rodar en el parque los primeros días, pero se me ha ocurrido demasiado tarde como para que Producción llegue con los permisos, así que cuando les paso el Plan provisional me dicen que tengo que cambiarlo. Pues eso, yo la dinámica y ellos la logística, pero siempre codo con codo.

Aprovecharé este punto para contaros una cosa que seguro que ya sabéis todos: cómo funcionan los permisos de rodaje en exteriores, cuando ocupamos la vía pública (el jardín de tu casa no cuenta, es tu casa, son tus reglas). Los permisos son algo de lo que se encarga en exclusividad el equipazo de Producción, pero desde Dirección tenemos que tenerlo en cuenta para coordinar qué podemos hacer y qué no. En España a grades rasgos van tal que así (¡contadme cómo van en el resto del mundo por fa!):
  1.          Acto Comunicado: es el mínimo, y está más pensado para reportajes, documentales y tal que para otros formatos que requieren más medios. Permite rodar allí siempre y cuando no se corte ni dificulte en ningún momento el tráfico (ni de vehículos, ni de peatones), no se utilice grupo electrógeno y el equipo no supere las 15 personas. A menudo prohíbe incluso plantar trípode, así que toca echar brazos (y pulso). Es gratuito, y si rodáis en Madrid lo podéis solicitar en el link que os dejo aquí.
  2.      Permiso de Rodaje: permite rodar básicamente cómo quieras, pero todo lo que vayas a hacer tiene que constar por escrito y adecuarse a las normas que procedan en cada caso. Los precios del asunto son variables en función de los metros que ocupes y de otras muchas cosas que se me escapan porque no soy de Producción. Dejémoslo en que no son baratos y sobre todo, no son demasiado fáciles de conseguir (como en todo, hay casos y casos: es mucho más difícil que te dejen cortar la Gran Vía, que un camino rural en Guadarrama). Y dentro de estos, además de todo lo que se especifica (que es mucho), hay que decir dónde será exactamente la:
o   Acción de Rodaje: el set en sí, donde tiene lugar la acción.

o   Reserva de Espacio: el campamento base, dónde aparca el equipo, dónde va maqui-pelu-vestuario, el grupo electrógeno, el catering, etc. Que será muy cerca de la acción de rodaje pero no allí para que no haya que estar moviendo el mundo cada vez que cambiemos el tiro de cámara.

De rodaje hace un par de semanas en la sierra de Madrid
¿Acto Comunicado o Permiso de Rodaje?

La tercera opción sería la guerrilla absoluta, o lo que es lo mismo: rodar sin permiso ocupando un espacio público. No vayáis de modositos que todos lo hemos hecho en algún momento (o en varios), pero no os lo recomiendo. Si te toca el funcionario que se ha levantado con mal pie, rodar allí tendrá consecuencias económicas y legales (y te pararán el rodaje); y como Ayudante de Dirección, tú y el Jefe de Producción sois responsables de ello. Así que si por motivos equis, te ves en un rodaje sin permiso mi consejo es el siguiente: no firméis la Orden (quedaréis exento de responsabilidad legal y luego ya allá tú con tu conciencia, y la Productora con lo que esté dispuesta a asumir).

Y sabiendo todo esto, sólo queda adecuar el Plan de Rodaje y las dinámicas en sí (equipo mínimo o a saco con los camiones y esas cositas), en base a lo que nos haya transmitido Producción que podemos hacer. 

En cualquier caso, y volviendo a la razón de ser de este post, os diré que Producción y Dirección son equipos separados y con sus propias prioridades y su jerarquía de mando, pero a la hora de la verdad funcionan como una piña. Que hablando de jerarquías, comparemos ambos equipos a nivel organizativo:


Los colores indican, más o menos, la correspondencia de “nivel de mando” en cada departamento. O lo que yo entiendo que manda cada cual, haciendo una media entre lo que estudié en su momento y lo que luego me he encontrado en mi vida profesional (Teoría vs. Práctica, vaya).

Como ya sabéis, la Orden de Rodaje la crea el Ayudante de Dirección, pero también necesita la firma del Jefe de Producción. Pues en eso seguimos, en coordinación. Yo tengo que saber los medios con los que cuenta Producción para saber qué pongo en la Orden y qué no. Por ejemplo, no pongo “grupo electrógeno” si el Jefe de Producción me dice que no lo tenemos, y sobre todo procuro contrastar mucho con ellos las horas a las que cito a los actores para facilitarles lo posible la ruta de trasportes. Y así con todo. Por ejemplo, cosas que hacemos cada uno:

  • Yo, como 1ª Ayudante de Dirección, fijo la hora a la que necesito a cada miembro del equipo técnico en set, y la hora a la que tenemos que estar LISTOS (dándole al REC). Y el Jefe de Producción coordina a su equipo para cumplirlo: ellos se encargan de elaborar la ruta de transportes (tanto del equipo, como del material necesario) y a veces también les llaman personalmente para citarles. Además, lo habitual es que yo envíe la Orden de Rodaje por correo electrónico a todo el equipo técnico, junto a la ruta de transportes que me ha pasado Producción. Ojo: en Gmail puedes enviar los correos con acuse de recibo para que te avisen cuando el destinatario lo haya leído (pero se te puede abarrotar la bandeja de entrada como el equipo sea grande).
    • En resumen: Yo digo a qué hora necesito al equipo ® Producción prepara ruta de transporte y cita a equipo ® Yo envío Orden por mail.
  • Yo fijo la hora a la que los actores tienen que estar listos para rodar en set, y coordino con maquillaje, vestuario y peluquería cuánto tiempo necesitan con cada uno (volveré a esto en otro post). Sabiendo cuánto tiempo necesitan esos departamentos, yo le comunico a Producción a qué hora tienen que estar los actores en la localización, con el tiempo extra para que maqui-pelu-vestu se pongan a trabajar. Y ellos me mandan de vuelta la hora a la que van a recoger a cada uno para cumplir eso. Y sabiendo todo esto, yo personalmente (o mi segundo, pero SIEMPRE desde Dirección), llamo por teléfono a los actores para decirles a qué hora se les recoge dónde (y otra serie de cosas), y a continuación les envío la Orden de Rodaje por correo electrónico, para que tengan todos los detalles de lo que van a rodar ese día (y se puedan preparar las secuencia y tal). Y de paso les repito por escrito en el cuerpo del mail su citación. Nunca está de más hacerlo para cubrirse, que con cariño os diré que los actores suelen ser personas… dispersas.
    • En resumen: Yo digo a qué hora necesito actores listos para rodar ® Maqui-pelu-vestuario me dice cuánto tiempo necesita con ellos ® Le comunico a producción la hora a la que tienen que llegar los actores a la localización ® Producción me dice a qué hora les recoge ® Yo llamo a los actores para citarles y después les envío la Orden de Rodaje.

* Consejo de amiga: en general no te saltes la jerarquía NUNCA, pero con este tipo de cosas ten especial cuidado en respetar la cadena de mando porque sino se puede liar parda. Yo procuro recordar siempre la frase que más me valió de cinco años de carrera: ORDEN + CONTRAORDEN = DESORDEN. Caos. Ciclogénesis. Despidos en masa.

¿Y en rodaje? ¡Vivan los walkies! El equipo de Dirección y el de Producción estamos en el mismo canal, y nos contamos muchas cosas por él (cosas serias y bromas varias, pero siempre estamos coordinados vía pinganillo). Y de nuevo, ojo a lo que decís por ahí. Por mucho que alguien la haya cagado (que las hay muy gordas), es mejor decírselo en persona, o pedirle que se cambie de canal y ser suave. Pero mi recomendación es que no regañéis o evidenciéis un error ajeno por walkie, porque es cruel (y de ser un poco mala gente). 

Detallitos en el catering con los que Producción puede alegrar tu mañana.

¿Y en qué nos coordinamos desde el set? Sobre todo en anticipar qué va a pasar a continuación. El equipo de dirección es... el que manda en el set, por decirlo de alguna manera. Pero lo que puede hacer por el bien del rodaje depende de cuánto se lo facilite Producción, que así en general son máquinas correcaminos, con el móvil como extensión del brazo, que se dedican a salvarle la vida al mundo. Todo el rato. ¿Marrón? Lo solventa Producción. Son las personas del millón de recursos, las que menos culpables buscan y más soluciones proponen. Gente que sabe sacarse las castañas del fuego y repartirlas entre el resto. Súper héroes entre cámaras a las que les vienen los problemas de dos en dos, y nadie sabe cómo pero de repente, dan la cara por el resto, y lo sacan. Deben de estar todos locos.

La verdad es que el de Producción siempre me ha parecido un departamento vocacional, y ciertamente masoquista. Pero si no fuera por ellos aquí no rodaba nadie nada. Así que invitarles a una cerveza hombre ya, ¡que ya está bien de que paguen ellos!

PD.- Soy consciente de lo laaaargo que es este post, y de que me estoy dejando diez mil matices en el tintero, así que estaré encantada de debatirlos con vosotros en la sección de comentarios :) ¡Salud!

25 junio 2014

Meteorología y exteriores: la gran aventura

El rodaje en exteriores siempre supone tener en cuenta muchos factores que en interior nos pueden dar más igual, y también implica una coordinación mayor con el equipo de Producción.

Lo primero a tener en cuenta es lo más obvio: el tiempo (meteorológicamente hablando). Ya os conté al hablaros del Plan de Rodaje de ese precioso invento que es el COVER SET, pero hoy os lo recuerdo: conviene poner los exteriores al comenzar el rodaje, porque si el día que vas a rodar resulta que cae el diluvio universal, podrás irte a lo que tuvieras en interior y volver a exteriores cuando mejore el tiempo. Pero si pones los exteriores al final y se tuerce la cosa, no tendrás más opción que posponer el rodaje y estaremos tirando dinero, así que evitadlo todo lo que podáis.

Rodaje de exteriores hace un par de semanas, en el que pasamos mucho calor de día
y mucho frío por la noche (la sierra madrileña es traicionera).

Y de este apunte me surgen cosas que contaros:

1.    A veces, en rodajes de bajo presupuesto en los que no se pueden permitir artificio alguno, lo que se busca es precisamente tener condiciones meteorológicas adversas. Que no es lo habitual, pero pasa, así que habrá que cuadrar los exteriores cuando sepamos que va a hacer malo, o que habrá nieve en la zona, etc. Y luego está el extremo contrario, el de poder permitirse mirar al cielo esperando a que se nuble, o directamente ir dos meses a rodar a Groenlandia. 

2.    La previsión meteorológica hay que actualizarla constantemente. Ahora mismo hay un montón de páginas para consultar el tiempo en cada municipio hasta por horas, pero lo que pone para cada día cambia más que un rodaje sin guión técnico. Yo os recomiendo que la actualicéis todo lo posible, y sobre todo que consultéis más de una (y de dos) páginas distintas y saquéis vuestras propias conclusiones. Que aún así, de cuando en cuanto fallan, pero cuanto más contrastada esté vuestra información, menos margen de error.

Recuerda: ¡clic en la imagen para verla en tamaño completo!

No olvidéis nunca poner la hora de amanecer y de atardecer porque afecta bastante al equipo de fotografía, y a nosotros mismos a la hora de planificar tiempos. En el caso de EXT/DÍA dependemos del todo de la luz natural, así que estamos bastante vendidos ante ella. Y en el caso de EXT/NOCHE lo mismo, porque lo suyo es montar antes de que sea noche cerrada, y en el momento de que amanezca se acabó lo que se daba. También podemos entrar en horas brujas y demás, pero eso ya es otro jardín como para entrar en ello hoy. 

El tema del viento también es importante actualizarlo. Lo suyo es tenerlo en cuenta localizando, pero la realidad es que también es un factor bastante variable y nos puede jugar malas pasadas. Afecta principalmente al equipo de sonido porque aunque haya formas de disimularlo, intentar rodar un diálogo en medio de un viento huracanado es una fiesta. Y para fiesta la de los pelos de la actriz, la de los papeles volando… 

Victor Matellano, director de la peli de abril,
tomándose la vida con humor.
Y por cierto, otra cosa divertida a tener en cuenta al hacer el plan de rodaje no es el orden en sí de las jornadas, sino la época del año en la que se rueda. A menudo por exigencias de las altas esferas nos toca rodar cosas cuando no debemos, pero si podéis evitarlo… hacedlo. Yo, por ejemplo, rodé un cortometraje que era un 90% exterior noche en agosto. Olé nuestros huevos, las noches más cortas del año. Y el pasado mes de abril rodé una peli con muchos EXT/DÍA. Que lo de “abril aguas mil” se dice por algo, y teníamos la excusa de que estábamos simulando estar  en Inglaterra, pero las lluvias son algo muy inconstante y a partir de cierto nivel de diluvio no se puede rodar. Y como empieces a plantearte el raccord, apaga y vámonos. Para que os hagáis una idea de lo que fue aquello, comparto con vosotros una gran frase del día de mi segundo: "Eva, me temo que tienes que volver a cambiar la Orden, porque al final hoy rodamos... NOÉ"

Sabiendo todo esto, también os recomiendo mucho que adecuéis vuestra ropa a todo ello. En general a un rodaje, sea donde sea, siempre conviene vestirse con ropa cómoda, pero en exterior tendréis que tener en cuenta también la meteorología: vais a estar a la intemperie mucho rato en un sitio concreto. Y sí, el equipazo de Producción te conseguirá sombras y bebidas frías, o incluso mantas y caldito, pero si estabas avisado de frío y apareces con una chaquetita fina, la pulmonía no te la quita nadie.

Especial atención en cuanto a esto merece el calzado. Si vas a rodar en la montaña, no lleves zapatillas de suela fina, porque vas a acabar cojo. Si llueve, no lleves calzado que cale y trae dos pares de calcetines. Y así con todo. Yo todavía me acuerdo de la cara de imbécil que se me quedó cuando, en un rodaje por las calles de Madrid, la Jefa de Eléctricos apareció en tacones. Pues eso, adecuación. Que nosotros estamos detrás de la cámara, y por mucho making que haya a nadie le importa que no vayas guapo, mientras tu ropa sea funcional.

Los cambios bruscos de temperatura pueden hacer estragos en tu voz,
y los ayudantes la necesitamos mucho. Por eso en exteriores
prolongados... el megáfono es mi gran aliado.

Además, y esto va solo para los ayudantes, os cuento que a mí lo relacionado con la meteorología me parece el punto perfecto para poner chorradas en la Orden de Rodaje que le alegren un poco la jornada al equipo (ya lo habéis visto por ahí arriba). Yo creo que el hecho de que seas simpático no le quita objetividad a lo que estás contando, es rigor profesional... pero con un toque de buen humor. Y sobre todo: cuándo alguien lee algún guiño al equipo en la Orden corre la voz y, ¡magia!, de repente todo el equipo pasa a leerse la Orden enterita a la caza de la tontada del día.


Otro día os contaré cómo me coordino yo con el equipazo de Producción, en cosas como permisos de rodaje, generadores, conseguir sombrillas y demás. Pero de momento… veeeeeenga a la calle a rodar, ¡que se ha quedado un día estupendo!

26 mayo 2014

[NSFW] Rodar orgasmos fingidos.

El rodaje de escenas de cama se puede plantear de formas muy distintas en función de lo que se haya acordado con los actores y, muy especialmente, de cómo se plantee la realización. Y además son las únicas escenas en las que el equipo técnico se ofrece voluntariamente para hacer figuración (¿eh?). El caso es que por casualidades de la vida, en los últimos meses he rodado unas cuantas escenas así, de modo que he decidido contaros mi punto de vista sobre el tema.

A mí cuando me llega un guión con secuencias de sexo (razonables), como ayudante me planteo principalmente dos cosas:
  1.  Cómo vamos a rodar esto.
  2.  Cuándo hacerlo (dónde ubicarlo en el plan de rodaje, vaya).
Lo primero, el cómo. Lo que hago es hablar con el director sobre hasta qué punto quiere ser más o menos explícito. Hay pechos pero no genitales, hay de todo, el desnudo es integral sí o sí, o jugamos a tangas color carne con sabanitas por encima. Esas cosas. Y por extensión de esto, hablaremos del tipo de realización que tiene en mente: no es lo mismo jugar al rollo videoclip con cámara en mano y trasfocos siguiendo las acciones de los actores, que una coreografía perfectamente planificada con planos fijos (en la que habrá que hacer más tomas porque al no girarse exactamente igual, hemos visto los calzoncillos a ese señor, por ejemplo). Así que la realización que se decida no sólo afectará a cómo lo rodemos sino también a cuánto tardaremos en hacerlo.

Claquetazo sobre la cama en 'Vampyres'. Foto Fija © Manuel Vera.

Y aquí interviene lo acordado con los actores. Siempre me he sentido muy responsable de que ellos se sientan cómodos en set, y como es lógico, en éste tipo de secuencias procuro estar aún más pendiente. Intento charlar con ellos en cercanía, y normalmente antes de rodaje, sobre qué les parece bien hacer y por dónde no pasan. Evidentemente esto es algo que también tratan directamente con quien les dirige, pero es mi responsabilidad coordinar la dinámica en set, y necesito prever cómo de cómodos se sienten al respecto. 

Todo esto es importante hablarlo con quienes vayan a intervenir en la escena, tanto en conjunto como individualmente. ¿Por qué? Porque para mantener el buen rollo en un rodaje, a menudo nos toca mordernos la lengua sobre algunos compañeros. Y por eso entiendo a una actriz cuando en la conversación conjunta me dice ‘Por mí no hay ningún problema, lo que vosotros digáis’, y luego en privado añade un ‘Eva, como me agarre más de la cuenta igual le suelto un sopapo, ¿eh?’.

Un poco en relación a esto llega también el cuándo rodarloVicente Aranda, que es un señor que de rodar sexo sabe un rato, dice que lo mejor es “ponerles a follar en los primeros días, porque luego se llevan mal”. Y razón no le falta, aunque yo creo que depende de muchas cosas. En una película de cinco semanas, por ejemplo, la teoría dice que lo ideal sería hacerlo en la segunda o la tercera. Para entonces ya tendrán más confianza, y se sentirán más cómodos tanto entre sí como con el equipo. Pero también les habrá dado a tiempo a discutir un par de veces o cinco, y a chocar general si son personas poco compatibles. Así que por entonces puede que tengan muchísima química o… nula. Y así en general, os aseguro que cuando los actores no tienen química ese polvo no se lo cree nadie.

En proyectos más tipo cortometraje, lo ideal sería rodarlo en la segunda o tercera jornada (para que les dé tiempo a conocerse un poco). Pero sea el proyecto que sea, habrá que adaptarse a más factores.  Pequeño consejo/ejemplo de adaptación: en confianza, preguntad a las actrices que tengan este tipo de secuencias cuándo van a estar con la regla. Es posible que por otras necesidades del plan acabe coincidiendo, pero si puedes evitar que así sea, estarás sumando muchos puntos a favor de una comodidad que va a hacer falta.

Siguiente punto pues: la coreografía. Como os adelantaba el otro día por Facebook con el documental de Clandestino de Actoresel sexo ficticio tiene muy poco que ver con el sexo real. Normalmente es una coreografía medida al milímetro de “Mientras tal pone la mano aquí, cual le besa allá y sube la pierna aquí. Giro a la derecha y movimiento tal.” Y todo ensayadito.

Todo esto evidentemente dependerá también de cuánto tiempo de preparación tengamos. Pero lo que suelo hacer yo en cualquier caso es el teatrillo previo in situ: actores vestidos con ropa cómoda, y ya con equipo mínimo, hacen la coreografía marcada en la propia localización mientras el director les da indicaciones. Y cuando ellos pasen a maquillaje y vestuario, se ilumina el set y se planta la cámara.

Sin embargo, os digo que también me he visto algún caso en el que la realización es cámara en mano siguiendo a los actores, mientras ellos ‘se dejan llevar’. Ahá. Esto puede pasar sólo y exclusivamente si los actores tienen una conexión bastante potente y están de acuerdo con el planteamiento. Y en cualquier caso, se pacta previamente un por dónde se van a mover y más o menos haciendo qué, para que el equipo de cámara sepa a qué atenerse. Y todo ello planteado con cortes en montaje y vía libre a la imaginación.

Secuencia de 'Vampyres', en la que rodamos sexo con efectos: el combo estrella.
Foto fija © Manuel Vera.

Sea como fuere, es importante tener en cuenta que cuando tenemos a actores semi-desnudos o incluso desnudos integrales, es responsabilidad directa del ayudante de dirección que se cumpla esa frasecita, que pongo yo en la orden de rodaje y que repito de viva voz varias veces a lo largo de la jornada: ‘Equipo mínimo, RESPETO MÁXIMO’. Y lo suyo es que en los ensayos (si los hay) sea así también, para normalizarlo cuanto antes. Igual que otros detalles como que cuando lleguemos a la localización donde vayamos a rodar eso, el combo se instale desde el principio en un lugar desde donde no se vea el set en sí mismo (tipo al otro lado de la pared de la habitación en la que está sucediendo la escena).

Ahora bien, el equipo mínimo es un montón de gente. Normalmente estarán allí operador de cámara, foquista, pertiguista y ayudante de dirección. Al que sumar vestuario y maquillaje para retoques, y que tengan prevenidos albornoces y demás para cubrir actores entre tomas (si quieren cubrirse, que hay de todo). Y a esto se le suma en combo: director, dire de foto, jefe de sonido y posiblemente productor ejecutivo. De modo que los actores están ahí con entre 9 y 15 personas mirando. Y como le sumes efectos a esa secuencia, multiplica. Lo ideal para sentirse cómodo, vaya.

Por eso lo del respeto máximo. Porque también es habitual que cuando el director dice ‘¡Cortamos!’ broten pequeñas cabecitas curiosas de todos los recovecos. Y no. Como ayudantes tenemos que esperar a que los actores estén cubiertos y a gusto para autorizar la entrada en set del equipo que tiene que seguir trabajando (reiluminando, equis). Y por supuesto, en estas secuencias ni una sola foto.

Y ya que estoy os dejo caer otra cosita que a veces pasa: somos humanos. Y las mujeres podemos disimular tanto como queramos la excitación sexual, pero ellos no pueden evitar que la suya sea… notoria (y notable). Así que si estás rodando una secuencia de cama y pasa algo así, mi consejo es que actúes con naturalidad. El hacer como que no pasa nada o echarnos unas buenas risas todos juntos lo marcará la actitud del actor al que le haya pasado, pero sobre todo, no le des más importancia de la que tenga. Y empatiza, que también he visto a más de un sonidista apretando fuerte los ojos para al menos no ver (pobrecicos).

En definitiva, en el rodaje de escenas de cama lo más importante, por el bien de la película, es que los actores se sientan cómodos. Y parte de esa comodidad va a depender de cómo de bien o mal se lo monte el ayudante de dirección. Al fin y al cabo, ellos son los que ponen cara a todo esto, así que se merecen todo el respeto del mundo. Delante, y detrás de las cámaras. 

26 abril 2014

The Clash of the Movie Magic II

¡Hola de nuevo a todos! Vuelvo a ser Mario Pérez, colaborador habitual de Eva Ferradas. Me alegro de la buena acogida que ha tenido el artículo de hace unos días. Espero que eso signifique que probáis o como mínimo, os ha dado curiosidad alguno de los programas que os presento. Os traigo los últimos seis, entre los que también hay peces gordos. 

Que la lista se acabe aquí no significa que no haya más, sino que son los que he conseguido encontrar a base de bucear en Google y me han recomendado. Así que si conocéis algún otro no dudéis en comentarlo, aquí mismo o en el canal de Facebook, para poder echarle un vistazo y contaros sus bondades (o no).

Bueno, no quiero entreteneros más, que os he hecho esperar un par de días ya para acabar la lista. Seguimos con los grandes rivales del Movie Magic:


Este es uno más de los que no tiene mucha información, así que me metí de nuevo en la prueba gratuita.

Tiene importación automática de guiones en PDF pero el desglose se hace en modo Movie Magic, con la ficha arriba y listado abajo para los que lo echen de menos. Organización en las tiras de siempre así que si os acordáis de tener a algún auxiliar recortando tiras para que entren en vuestra carpeta de siempre, olvidaros. Manejar listas de equipo y actores es fácil, igual que rellenar una orden automática predefinida con las horas de llegada y esas cosas.

Nada nuevo, pero bastante intuitivo y con pocas opciones donde perderse. Un diseño sobrio y múltiples opciones, aunque como os dije, la poca información y ayuda para usarlo, puede daros quebraderos de cabeza.



Antes se llamaba Indie Intern y era bastante básico. Después de un lavado de cara, su objetivo son exclusivamente producciones pequeñas. Tiene un diseño atractivo y no tiene suficientes opciones como para desesperarte, además, la gran mayoría de apartados son bastante sencillos de utilizar.

La gran pega de este programa es que parece recién salido del horno. Casi nada funciona como debería, las fechas no son correctas y varios apartados no tienen suficiente información. Un ejemplo, aunque en el resto de apartados te aparezca que están planificadas, en el calendario no salen los días de rodaje, ¡aunque los hayas planificado en el calendario!

Teniendo en cuenta que me he tenido que hacer la cuenta gratis (pero poniendo mi tarjeta de crédito) para contaros esto, no os lo recomiendo para un salto a gran escala. No hay mucha información, ni tutoriales para hacerse con su manejo. Si aun así, os llama la atención, dadle tiempo para crecer. Pero para el precio que piden actualmente, no vale la pena en absoluto.



Otro de esos sonoros WHAO para este programa. No es muy intuitivo y la versión gratis es algo renqueante, pero sus capacidades son increíbles.

Si tienes un equipo grande en una producción que necesita no tener escapes de información, este es tu programa. Una facilidad brutal de añadir marcas de agua, distribución de guiones, separatas en dos clics, niveles de acceso a la información y un largo etcetera.

Tiene muchos niveles de pago, desde cortometrajes hasta series de televisión, con más o menos opciones. La básica, es eso mismo, básica, pero cumple su cometido muy gratamente. Las hermanas mayores tienen de todo, una web para que el equipo esté informado, tropecientos informes, emails automáticos dentro mismo del programa y muchas cosas más.

Varios apartados tienen un aire a Movie Magic así que muchos os sentiréis cómodos, pero como todos, tiene pequeños problemas. ¿Un programa tan configurable y no me deja cambiar manualmente el número de las secuencias? Me lo esperaba de otros, no de este. A veces exportar directamente de un guión no es tan cómodo como parece.



De Dramatify os puedo contar que el diseño me parece interesante y que tiene muchas opciones a la vista. Es totalmente diferente a Movie Magic y aún esta en fase Beta, es decir, sin completar.

Eso implica que varias cosas se queden cortas. El diseño no está pensado para la personalización y muchas veces os preguntaréis dónde esta una opción para luego descubrir que simplemente, ésta no existe. En vídeos me pareció completito y su uso de los móviles están bastante bien, pero aún le falta un largo camino. 

Siendo un programa que esta en fase beta hay que apuntarse para que te dejen probarlo. Yo me apunté y a la semana o así recibí respuesta. Os lo pongo para que lo tengáis en cuenta, porque estos sí que están haciendo mucha publicidad y tal vez lo escuchéis en alguna feria del sector.



Si, también he incluido Adobe Story Plus. Yo lo he utilizado para escribir varias veces, pero la versión de pago también permite planificar rodajes.

Su metodología de trabajo puede ser un poco liosa, pero funciona. Te reconoce varios datos automáticamente y además al cambiar el guión actualiza las planificaciones que has hecho, incluyendo personajes nuevos y avisándote de cambios específicos en todas las secuencias. Además de poder exportar estos datos a programas como Movie Magic, puedes pasar todos los metadatos incluidos al Premiere para que la postproducción tenga el guión a mano.

Siendo sinceros, la aplicación no tiene muchas opciones para desglosar, ni tampoco personalización exhaustiva. Pero ojo, es Adobe y eso significa que mejorará y crecerá paulatinamente.



Este lo incluyo porque me parece intuitivo y útil, pero no creo que se trate de un programa de planificación de rodajes exactamente. Por encima de todo, es para crear listas de planos, decidir su orden, añadir storyboards, etc.

Lo interesante del programa tiene que ver más con el día a día. Te permite hacer una lista de planos diaria, no de secuencias. Algo que suena interesante para directores y ayudantes de dirección, sobre todo si lo combinas con un modo "Live", en el que puedes ir tachando planos,  añadiendo tomas buenas y que te dice si vas en hora o con retraso.

Es una aplicación de iPad e iPhone, pero su sincronía automática y la portabilidad de estos aparatos me hacen compartirla con vosotros.



Aquí acaba nuestro viaje, pero creo que ha sido interesante. Casi todos estos programas funcionan, el punto de perfeccionismo, cabezonería y tiquismiquismo (toma ya) que tengáis os hará valorar unos sobre otros. Yo soy mucho de todo lo anterior, así que me quedo con dos, tal vez tres.

Os recomiendo que de las próximas jornadas libres que tengáis, utilicéis una para conocer uno de estos programas. Merece la pena. Algunos más que el Movie Magic. Mucho más. 

¡Un saludo compañeros!

23 abril 2014

The Clash of the Movie Magic I

Yo recorriendo camerinos.
Mi nombre es Mario Pérez, colaborador habitual de Eva Ferradas y os traigo hoy un artículo prometido por ella hace demasiado tiempo. Llevaba escrito dos semanas, pero entre las vacaciones y que Eva y yo tenemos que coordinarnos para subirlo y maquetarlo, se ha retrasado más de lo que debería. En breves Eva termina su película y volverá a la carga con todos vosotros. Sin más dilación os dejo con ello:

Existen pocas alternativas, incluso hoy en día. La gran mayoría de los que nos dedicamos a esto llevamos muchos años utilizando el Movie Magic Scheduling, muchos incluso atascados en su versión 3.6 por razones que no vienen al caso (pillines).

He de decir que nunca me gustó, nunca me pareció cómodo y busqué otros programas del estilo siempre que pude. Llegué a experimentar con el Gorilla que me pareció muy superior en su momento, pero nadie quería cambiarse a algo que no conocían. ¡Algunos no querían ni soltar el Excel!

Hoy en día, incluso eso se ha quedado atrás. Sigo utilizando el Movie Magic por trabajo, pero en mis propios proyectos, experimento con distintas herramientas. Tener el smartphone en la mano tiene que servir de algo cuando estás perdido en una localización y te has dejado el portátil en el hotel.

Os traigo un listado de programas de desglose, planificación y a veces hasta presupuestarios on-line. Con las características que creo que van a convenceros para dar el salto sin miedo.
  • Son programas en la nube. Lo que implica que podrás acceder desde cualquier parte del planeta con cobertura.
  • Muchas opciones son automáticas. No tendrás que rellenar apartados con la información que ya has escrito en otra parte, rellenará campos automáticamente.
  • La centralización de los equipos. Se acabaron los excel de cada equipo con todos sus requerimientos, ellos también trabajan dentro del programa.
  • La colaboración. Todos podéis trabajar a la vez y los cambios se actualizarán en tiempo real para todos.
  • Pruebas gratuitas. Si, podéis probarlo, algunos incluso tienen versión reducida GRATIS para que os hagáis un corto de prueba antes de meteros a rodar una película de millones con él.
Esta entrada ha quedado tan larga que hemos tenido que dividirla en dos. Empezamos con cinco programas y pronto tendréis los seis restantes. Os aviso que no están puestos en un orden concreto.



Empezamos con Scenios que es uno de los que ha hecho una buena campaña de marketing. Aunque no es el más completo de todos, te permite una gran libertad y manejo. Lo usan varias productoras potentes y crece día a día.

Scenios es un programa pequeño que puedes hacer enorme, pues todos sus apartados son pequeñas apps. Si necesitas hacer un calendario, añades la app correspondiente. Si quieres empezar a localizar, sorpresa, añades la app correspondiente. Incluso puedes editar el guión online y si echas de menos desglosar con tus marcadores fluorescentes en papel, el sistema aquí es parecido.

Este programa se aleja de Movie Magic en cuanto a formato y distribución, así que asumid que habrá una curva de aprendizaje. Por el resto es bastante completo y si no eres muy tiquismiquis será un buen compañero de desglose. Si lo eres, la poca personalización, te dolerá a cada click.




Seguimos con uno poco conocido y del que no hay casi nada de información. Yo me he tenido que poner la versión de prueba para poder contaros un poco sobre él.

El programa esta bien ordenado y es limpio pero, aunque tiene formatos estandarizados, habrá veces que vas a buscar una opción en concreto por varias páginas. Los desgloses se parecen al formato Movie Magic y con la importación de guión, te crea automáticamente las secuencias por sus encabezados.

Lightspeed EPS parece también bastante enfocado a producción, con aplicaciones de móvil para que el equipo que trabaja por horas no tenga que rellenar horarios en papel y además lleguen directamente a quien lleva la contabilidad. La aplicación también tiene notificaciones automáticas, con órdenes de trabajo en formato móvil.

Es bastante completo, tiene un poco de todo pero poca personalización. Yo soy de los que siempre que veo que me falta una opción en concreto o el formato de los desgloses no me gusta, echo de menos el Movie para mi dolor.



¿Celtx? ¿Pero si Celtx no es para escribir y además no es online? Pues ahora si. Además de escribir gratuitamente, en cualquier parte, Celtx ahora tiene un conjunto de herramientas online que abarca todo el espectro de una producción: guión, desglose, planificación y presupuesto.

Se parece a Scenios, no lo voy a negar, pero me parece más completo que aquel. Los presupuestos ya son un gran avance, que aunque están en formato americano, cada apartado es personalizable.

Echadle un vistazo, que podéis pasaros un rato navegando a través de su prueba gratuita. Tiene mil idiomas, incluido el castellano, y siempre viene bien tener un programa de escritura dondequiera que estés, así que aprovecha.



Nuestra entrada española. Shootize nació en Las Palmas de Gran Canaria y estoy muy contento con la evolución que ha tenido en los últimos meses.

Hay que ser sincero, y la primera vez que lo probé, a parte de ser el primer programa online de este tipo que probaba, no me parecía nada cómodo. Viniendo del Movie Magic, pensar en la comodidad es casi una broma.

Los chicos de Shootize le están dando caña al programa y haciendo acuerdos con escuelas de toda España para utilizarlo.

Igual que el Movie, no trabaja con el guión sino con el desglose directamente. Añades las secuencias manualmente o importando tu proyecto de Celtx (con el problema de distintos guiones en un mismo proyecto, los importa todos). A parte, agregar necesidades, elenco y planos a cada secuencia es fácil. Organizas rodaje a través de calendarios que son bastante majos y haces informes y órdenes de rodaje casi automáticamente. Echadle un vistazo.



Una de las cosas por las que probablemente nadie deja el Movie es por su personalización. Desde órdenes hasta informes. Pues bien, en TheTakes TODOS los apartados son personalizables. ¿Que en la lista de desglose no esta el departamento "Notas a producción"?, ¡pues lo pones!

Importas guiones de Celtx, Final Draft o Word, desglose inicial instantáneo, condiciones avanzadas de búsqueda y enlace entre secuencias. El creador de planos es muy potente, incluso elijes si un actor sale en la secuencia pero no en el plano, para no tenerlo ahí. Tiene hasta una planificación de rodaje automática, en la que si has puesto todos los datos, sólo tendrás que ajustar un poco el resultado. Y para los más sibaritas, permite crear plantillas para todos los documentos que te crea automáticamente, ¡como el Movie! Echadle un vistazo porque no es ni la punta del iceberg de lo que ofrece este programa.

Tal vez no sea muy intuitivo, ni tenga un diseño resultón como otros y tiene varios fallos de traducción (¿he dicho que está en castellano?) porque la traducción esta en fase beta, pero la capacidad de personalización y la profundidad de sus opciones lo hacen mi preferido. Ojo, esto son opiniones personales. 


Eso es todo por ahora compañeros, ¡hasta la próxima!

05 marzo 2014

¡Sonido graba!

Lo diré sin rodeos: adoro a los sonidistas. En general y mucho. Son de las personas más agradables del set, casi siempre están listos cuando se les requiere y pocas veces se les tiene en cuenta todo lo que se debiera. Y muchas, muchas veces, esa falta de atención es culpa (entre otros) del ayudante de dirección.

A mí me ha costado mis añitos entender cómo y cuánto afecta directamente mi curro sobre el suyo (y seguro que todavía se me escapan cosas de vez en cuando), así que hoy os voy a contar cómo procuro relacionarme yo con ellos y que así todos seamos más felices.

Proyecto (ya adorable) de sonidista
Mi relación con sonido empieza en los desgloses de guión. ¿Os acordáis del cuadradito ese marrón de abajo a la derecha? Ahí teóricamente y según lo que se enseña en las clases de producción, sólo hay que poner lo relativo a sonido directo (diálogo), o efectos (disparos), playbacks y demás. Pues como a mí la teoría me da un poco igual, aplico eso  de una forma más extensa, una vez cerradas las localizaciones. Por ejemplo, si esa secuencia se va a rodar en la casa de mi abuelo, añado un ‘ojo, recordad que el suelo cruje’, y pongo en notas a producción (que NO en arte) un ‘alfombra o moqueta’. Y pongo recordad porque el sonidista ya lo sabe, de cuando vino a localizar.

Para mi es fundamental que el jefe de sonido (y su microfonista si le cuadra la agenda) vengan al momento de scouting, porque aunque yo procuro estar pendiente de cosas como que una ventana cierre mal, o que pase una carretera gorda por al lado… la realidad es que no soy experta en sonido. Si ellos vienen podrán hacer mucho mejor y más rápidamente su trabajo, ya que preverán los imprevistos (valga la incoherencia) con más agilidad. Y sobre todo: me los comentarán y yo haré lo posible, coordinándome con producción, para facilitarles la vida un poquito.

Yo hace unos años, en mi primera
y última experiencia en sonido.
Después, en la orden de rodaje, incluyo siempre la obviedad de los móviles en modo avión y sobre todo, compruebo que aparezcan las anotaciones a sonido que ya había pasado al desglose (actualizadas si he podido debatirlas con ellos). Si por ejemplo rodamos en una localización natural con los techos muy bajos, y nuestro adorable director sólo quiere planos muy abiertos, los pobres sonidistas tendrán que llevar un cargamento extra de micros inalámbricos (y vestuario y actores tendrán que ser gente maja).

Y como sabéis que mientras preparo la orden de rodaje me hago también mi papelito confidencial para mi, a menudo apunto ahí también los wild tracks que preveo que vamos a tener que hacer. Realmente no haría falta ponerlo porque en hacer un wild track no se tarda nada, pero a menudo lo incluyo para no despistarlo de mi mente. Y así tal cual, ha llegado el momento de demostraros que también sé ponerme seria. Os cuento:

Cuando el equipo de dirección pide silencio, se refiere a silencio. Absoluto. No es un ‘oye chicos, hablad bajito…’. Es un CALLAROS. Es un no andes. No muevas material. No hagas ruido más allá del inevitable por tu respiración. Es curioso ver como a nadie del equipo se le ocurre plantarse delante de la cámara en toma, pero a muchos les parece bien chuchichear y hacer risitas por detrás. Y el ‘pspspsps’ de los susurros es dificilísimo de eliminar después. En serio chicos, lo que está pasando en el combo lo vemos todos, pero el sonido que se está registrando sólo lo escucha quien lleva cascos. Y no te oye pensar, pero casi.

Mantener el silencio en set es responsabilidad directa del ayudante de dirección, y lo de que ‘va en serio’ es aplicable a cada toma por una cuestión lógica, pero lo es muy especialmente en el momento de grabar un wild track. Lo normal es que sólo necesiten en torno a un minuto para poder hacerlo, pero requiere del silencio de todo el equipo. Yo me he encontrado con situaciones en las que he pedido silencio para wild track y me han dicho un ‘oye, mejor nos vamos fuera y así no molestamos, ¿no?’ o incluso un ‘danos 5 minutos que recogemos esto y ya lo grabáis solos y tranquilos por fa’. NO. Lo que estamos grabando es el sonido ambiente que había en esta habitación durante la toma, y ese ambiente incluía desde el ruido de la cámara hasta la respiración de todos los que estábamos allí. Así que compañerismo, mangurrianes :)

De vez en cuando también, y por esto del trabajo en equipo, como ADs nos toca mediar entre el DOP y el equipo de sonido. Los DOPs más majos sí les tienen muy en cuenta, y se coordinan con sus eléctricos para tapar sombras de micros con banderas y demás, pero también con mucha frecuencia soy yo quién me encargo de decirle al microfonista hasta dónde puede entrar, viendo el cuadro. Igual de importante, en cuanto a que somos nexo director-equipo, es asegurarse de que el director entiende por qué sonido está haciendo lo que hace, o reclamando que se le deje hacer. Y aquí entran dos frases demasiado recurrentes en rodaje:
  •           Esta va muda.
  •           Bah, pues lo doblamos.
En mi opinión, esas dos decisiones (que son importantes y hay que evitarlas todo lo posible, por lo que van a suponer en pospro) sólo debería poder tomarlas el jefe de sonido. Y se las he oído a muchos directores y dires de foto, pero jamás he oído a un sonidista decir ‘oye, apágame ese foco, que estoy haciendo sombra por su culpa’. Es igual que lo de muchos directores, que viendo el combo sin cascos sueltan un eufórico ‘¡es buena!’, mientras veo al pobre jefe de sonido hacerse un facepalm.  Así que venga chicos, si todos sabemos que dedicándole 5 minutos a resolver algo en set se ahorran horas (y dinero) en postproducción, intentemos valorar un poco más el trabajo de todos y hagamos el que el mundo además de ser más bonito, suene mejor, ¿os parece?

Y ya de paso, haceros amigos de los sonidistas, en serio. Suelen tener mucho sentido del humor, casi nunca niegan una caña y encima te recomiendan grupos de música maravillosos que tú no sabías que existían. Y yo creo que como siga derrochando tanto amor por ellos me voy a acabar haciendo una camiseta de ‘I <3 WILD TRACKS’ para ir a rodar. Jajaja, definitivamente, voy a hacerlo.


PD.- Para los que os interese el tema y creáis que me he dejado mucha carne por echar al asador, os dejo por aquí una muy recomendable carta abierta del departamento de sonido al resto del equipo, escrita hace ya unos años por Jhon Coffey y otros grandes de las ondas. Enjoy!